El Mal Economista

Publicado el El Mal Economista (EME)

Toda bala es perdida

Por: Pedro Oswaldo Hernández Santamaría

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“Toda bala es perdida, toda víctima es hermana”: César López.

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Fuente: http://www.usergioarboleda.edu.co/altus/cesar-lopez-escopetarra.htm

Audio: “Toda bala es perdida” de César López: https://soundcloud.com/cesarlopez/toda-bala-es-perdida-cesar

¿Quieres más guerra? ¿Quieres más confrontación armada? Bien, recuerda que “Toda bala es perdida, toda víctima es hermana”.  Tanto soldados como insurgentes, jóvenes de las ciudades y el campo, niñas y mujeres en las calles, toda víctima de la violencia es nuestra hermana, y nos debería doler a todos y todas.

En esta ocasión, quiero compartir a la comunidad de lectores de El Mal Economista algunos apartes de las tertulias que tanto en la Universidad de Los Andes como en su Asociación de Egresados (Uniandinos) pudimos disfrutar en marzo y abril de este año junto a César López: músico, compositor y creador de la famosa “escopetarra”, con el apoyo de ReD (rodeemos el diálogo), EcoAndinos (capítulo de egresados de Economía) y Uniandinos por la Paz.

La idea del artista detrás de estas tertulias es concienciar acerca de la necesidad que en “Colombia dejemos de seguir oponiéndonos a nuestros opositores y convenciéndonos entre los convencidos” y propiciar diálogos sinceros en torno a la posibilidad de la paz en nuestro país. En mi caso, como asistente que fui de estas tertulias, me quedó claro que el arte y la cultura, y específicamente la música, son fundamentales para conseguir, mantener y construir la paz.

Apreciado lector, ¿cuál es tu sueño para este país? ¿Cómo te imaginas cumpliendo tus metas y objetivos en ese país soñado? Como joven, yo estoy convencido de la posibilidad de vivir en una Colombia en paz. Esta misma convicción caracteriza a César, quien ha puesto su pasión y su trabajo al servicio de este sueño por una Colombia mejor. Sus historias, sus canciones y ese objeto simbólico que siempre lo acompaña llamado “escopetarra” –una combinación de un fusil AK-47 y una guitarra– nos confirman que como ciudadanos podemos convertir nuestras ocupaciones y labores en herramientas poderosas para transformar positivamente el contexto que nos rodea y las vidas que nos acompañan.

Querido lector, ¿tomas partido en la idea de vivir en una Colombia en paz? Todos deberíamos tomar partido. ¿Quieres ser escéptico y crítico? Está bien, selo y exprésalo. ¿Quieres ser soñador y quizás “ingenuo”? Selo y no dejes de expresarte y esforzarte por permanecer firme en esa convicción. Las afirmaciones de César que he referido aquí se sustentan en su ejemplo y trayectoria que pasa de un grupo musical llamado Poligamia a una serie de proyectos de impacto social que llevan al final a la creación de su escopetarra como un símbolo de transformación de un instrumento de guerra a uno de unión y fraternidad.[1] Múltiples expresiones a través de canciones, álbumes y actividades artísticas en procura de concientizar sobre la importancia del amor, la amistad y la no violencia. Por si acaso, si deseas saber más acerca de los proyectos y las historias que compartió César en estas tertulias, puedes consultarlo aquí.

Quiero llamar la atención acerca del título de este artículo, pues toda bala disparada en contra de otro ser humano es una bala perdida. Sólo una AK-47 en la que se basa la escopetarra, puede disparar 5 balas en 3 segundos,[2] y su valor equivale apenas a unas cuantas bolsas de leche.[3] Es el fusil que más ha matado seres humanos en el mundo, preferida para la guerra por su bajo costo y ligero peso.[4] La guerra así como la paz tienen costos, pero es más costosa la guerra que la paz: la guerra sólo nos cuesta, la paz nos beneficia. Ya está demostrado, nuestro país en situación de paz puede tener mejores perspectivas a nivel económico, social y político.

Hay un dividendo de la paz de mediano y largo plazo que el país no puede desaprovechar por los desaciertos del corto plazo. Con un cese del conflicto se podrá esperar mayor atracción de inversión extranjera y mayores posibilidades para el emprendimiento y la innovación. Así mismo, mayores oportunidades para el fortalecimiento institucional, el fomento a la educación, la mejora del mercado laboral, entre muchas otras mejoras que hacen parte del desarrollo humano.[5] Esto lo afirma Ana María Ibañez, decana de la Facultad de Economía de la Universidad de Los Andes y miembro del Grupo Asesor del Fondo para la Consolidación de la Paz del Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon.[6]

Los diálogos de Paz entre el actual gobierno y la guerrilla de las Farc, y las que se puedan dar con las demás guerrillas, debe ser un motivo de esperanza y fraternidad para los colombianos y no de polarización y división. Si estas dos partes logran ponerse de acuerdo en Cuba, como afirma César: “se dará una gran lección al país de que todos podemos solucionar nuestras diferencias a través del diálogo”. ¿Estamos dispuestos a escuchar al otro? ¿Queremos escuchar la opinión del otro? ¿Buscamos conocer la historia de aquellos que han pagado las consecuencias perversas de la guerra? Dispongámonos y eduquémonos para escuchar a nuestro “adversario”, a aquel que alguna vez consideramos nuestro enemigo. Necesitamos poder hablar confiadamente con los demás pues más parece que «en este país no hay oídos suficientes, no hay gente que quiera escuchar. (…). Se trata de educar orejas que quieran oír. Hay mucho que contar, hay mucho que decir, pero nadie quiere escuchar”.[7]

No permitamos que se pierdan más vidas en medio de la selva y las montañas. No permitamos más muerte de colombianos y colombianas, no permitamos más la triste realidad de “Soldados sin odio disparan por encargo; De viejos sin alma que viven de la guerra.”[8] Si nos duele de verdad la realidad que vive Colombia ¡hagamos algo que cambie nuestra trayectoria! Seamos la generación de la no violencia, la generación de la paz, sea cual sea nuestra condición y origen.


[1] “La escopetarra es un perfecto ejemplo de cómo la creatividad para la muerte puede ser convertida en creatividad para la vida”: César López. Fuente: https://goo.gl/9iw07h

[2] Universidad Pontificia Bolivariana. Fuente: http://goo.gl/vSoXif

[3] Una comparación que aplica perfectamente con la célebre frase del cantautor Jorge Velosa, carranguero boyacense, en la que afirma que: “lo poco que cuesta un tiple y lo bonito que suena y lo mucho que cuesta un rifle y lo tan feroz que truena”. Fuente: http://goo.gl/j1wdJj

[4] Rodeemos el Diálogo (ReD). Tertulia Musical de Reconciliación y Paz con César López. Fuente: https://goo.gl/9iw07h

[5] Ana María Ibañez. Costos del conflicto y beneficios de la paz. El Tiempo.com. Fuente: http://goo.gl/LyWvl7

[6] El Tiempo.com. Colombiana hará parte de grupo asesor del fondo para la paz de la ONU. Fuente: http://goo.gl/GPavBH

[7] César López, en Altus. Universidad Sergio Arboleda. César López: el artista de la Paz. Fuente: http://goo.gl/uefBLm

[8] Fragmento de la canción ¿Qué vas a hacer? De César López. Fuente: https://goo.gl/9iw07h

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