Sentimiento Embajador

Publicado el sentimientoembajador

Paso a paso y con los pies en la tierra

Nadie nos puede quitar la alegría de haber clasificado a la semifinal del torneo colombiano eliminando al actual campeón, Once Caldas, pero también pido mesura en las expresiones públicas de hinchas y medios, pues aún no hemos ganado nada y el camino que queda es largo y tortuoso.

Aventurarse a proclamarnos campeones o finalistas anticipadamente no solo es pretencioso teniendo en cuenta las calidades del rival de turno, sino incluso irrespetuoso, pues los partidos no se ganan en los periódicos o en las reuniones de amigos y mucho menos en los entrenamientos.

La aventura que aún nos aguarda no es sencilla.  Equidad es el equipo bogotano que, en los últimos años, ha tenido la mayor regularidad en términos de resultados.  Sustentados en una organización económica fuerte (aunque hoy día cuestionada por el carrusel de la salud en el que está vinculada la organización Saludcoop), el cuadro asegurador ha tenido la continuidad necesaria para llegar a dos finales en su corta estadía en la A.  De la mano de un técnico trabajador, ha rotado su nómina de manera precisa, tanto que no tiene mayores figuras de renombre , pero que con trabajo se planta en la cancha como un onceno compacto, con problemas de definición pero muy seguro en defensa.

Este año nuestro rival acumula nueve partidos ganados y seis empatados; 25 goles a favor y 15 en contra, es decir que tiene la mejor defensa del torneo; y en la reclasificación acumula 33 puntos.  Nosotros llegamos con nueve triunfos y cuatro pariedades; 32 goles marcados y 24 recibidos, es decir la cuarta delantera más goleadora y con 31 puntos en la reclasificación.

Así las cosas, el sábado no tendremos una pera en dulce al frente, pero obviamente tampoco es una escuadra invencible.  Nosotros también tenemos lo nuestro, así que ya no vale la pena seguir diciendo qué se hace mal y es mejor profundizar en nuestras fortalezas.

El equipo no sale a esconderse, abre las bandas con propiedad, crea riesgo en el área rival, tiene confianza para pegarle al balón de media distancia, a medida que avanzamos en el torneo ganamos en confianza y en mentalidad ganadora, es un equipo que respeta su camiseta y que suple sus debilidades con corazón y entrega.  Hay comunidad al interior del plantel, los jugadores le creen al técnico y aunque tenemos una dependencia en el gol con Toloza, se ha demostrado en varias ocasiones que él no es el único que sabe marcar.

Es necesario que la hinchada siga firme en su compromiso de apoyar y acompañar al equipo.  Si abren la totalidad del estadio o solo el costado de oriental, la obligación es llenar el Campín, vestir de azul y blanco la fiesta, cantar y apoyar los 90 minutos, hacer sentir la localía y rodear a los jugadores con esa energía que tuvimos contra los albos.  Ojalá que la Alcaldía y el IDRD entiendan de la importancia del compromiso y autoricen la apertura de todo el estadio.

Unidos vamos a llegar más lejos.  Nadie nos garantiza el triunfo, pero estar aquí ya es una victoria, cuando en diciembre muy pocos daban un peso por el proceso.  Si pasamos a la final seguiremos celebrando y cosechando la ilusión, pero siempre paso a paso, sin adelantarnos a los hechos y sin triunfalismos innecesarios.  Medio país futbolístico está esperando el resbalón para burlarse de nosotros y de lo que no se han dado cuenta es que independiente del resultado deportivo, este semestre ya ganamos, pues las bases del gran Millonarios ya están puestas, simplemente hay que seguir trabajando seriamente y con honestidad.

Tal y como lo expresé en mis columnas anteriores… NO HAY EXCUSA PARA NO IR AL CAMPÍN ESTE SÁBADO!!!

Comentarios