Yo veo

Publicado el Diego Leandro Marín Ossa

BUFFALO BILL DE PASO POR BROADWAY Y MIAMI.

Cortesía de Carlos Bernal, fotografía de Andrea Villarraga.

Los días 21 y 22 del pasado mes de diciembre en Casa de la Cultura Navarrete en Broadway, Nueva York, se presentó con amplia aceptación la obra de teatro “EL OCTAVO PECADO DE BUFALLO BILL” del autor colombiano Carlos Bernal, representado por EL “Grupo Esacto“ de Bogotá y dirigido por Jorge Herrera. El próximo 11 y 12 de enero, actuarán en la sala de teatro independiente “EL BAR” en Miami, Florida.

LA OBRA

En plena era digital, vislumbrándose la “partícula de Dios”, el tataranieto de Buffalo Bill y Gerónimo «el último guerrero apache», que en la actualidad cuenta con 187 años, recorren los escenarios con su teatro de barraca. El rostro pálido expone las gracias y el talento del guerrero indio. Nos cuentan su historia: cómo fue cazado, capturado y castigado por el 7º de Caballería en la Batalla de Wounded Knee, los últimos días del lejano oeste y el proceso de culturalización y formación artística del apache.

Sucesivamente, los descendientes de Buffalo Bill han ido heredando su chaqueta de flecos, el legendario sombrero y a Gerónimo. Así, han podido representar ininterrumpidamente su show durante más de un siglo. El indio duerme en una nevera, se alimenta de jugos y frutas y solo es descongelado para que actúe en la función.

Van por el mundo cosechando algunos éxitos y muchos fracasos con su espectáculo de variedades «Los 7 pecados de Buffalo Bill». Y aunque conocen a la perfección los trucos del vodevil y algo de alquimia, con el correr de los tiempos y el trepidante desarrollo de la técnica, la función da apenas para sobrevivir malamente. Ruina y decadencia crean conflictos entre estos dos bravíos representantes de sus etnias.

Por fin llega la tan esperada invitación! Ante sabios y estudiosos, presidentes y artistas del planeta, Buffalo Bill y Gerónimo presentarán su espectáculo en el 1er Simposium Mundial sobre Milenio e Interculturalidad de Toronto. Esto cambia las cosas… y allá van, en pos del dorado de su éxito. Lo que no saben estos dos artistas inseparables, antaño enemigos, es que 200 años después sus cuerpos reducidos y disecados harán las delicias de turistas y visitantes del Museo Histórico- Antropológico, en Toronto.

Cortesía de Carlos Bernal, fotografía de Andrea Villarraga.

EL DRAMATURGO

Se hizo actor en el Teatro Experimental de Cali al lado de Enrique Buenaventura entre 1968 y 1978, y hace 24 años se mueve entre España y Alemania como director, docente y dramaturgo.

Formado en la Creación Colectiva encontró cómo es que el actor se vuelve autor en las improvisaciones. Hombre de una amplia cultura teatral, se nutre de los mitos, de las imágenes y palabras, del cine de Buñuel, la tragedia de Shakespeare, el TEC y La Candelaria, de la vida cotidiana y la metáfora.

Hace diez años emprendió el camino placentero de la dramaturgia, y se perfila como uno de los escritores más prolíficos del habla hispana gracias a su mirada de la condición humana en la actualidad, y a su maestría a la hora de resolver en escena situaciones y personajes ricos en posibilidades interpretativas.

El dramaturgo Carlos Bernal, fotografía de Diego Leandro Marín.

ENCUENTRO DE AUTOR Y DIRECTOR

Carlos Bernal y Jorge Herrera, cursaron estudios en La Escuela departamental de Teatro de Cali, de donde pasaron a la plantilla de actores del T.E.C. (Teatro Experimental de Cali) y allí permanecieron  más de una década. Fue el período en que, entre otras cosas, se abrió al público la sala (en 1969), se trabajó a fondo en la elaboración del MÉTODO DE LA CREACIÓN COLECTIVA, y el grupo llevó con éxito el teatro colombiano por importantes escenarios y festivales del mundo: Nancy, Roma, Paris, San Francisco, Los Angeles, Quito, Caracas, Puerto Rico, Méjico, Madrid, Barcelona, Polonia, etc. Participaron en el montaje y estreno de obras tan emblemáticas como: LOS PAPELES DEL INFIERNO, SEIS HORAS EN LA VIDA DE FRANK KULAK, LA DENUNCIA y A LA DIESTRA DE DIOS PADRE, todas de Enrique Buenaventura, o EL CANTO DEL FANTOCHE LUSITANO, en versión de Buenaventura sobre el texto de Peter Weiss, así como LOS INOCENTES, versión del maestro a partir de la pieza de Emmanuel Roblés. También pertenece a ese período EL METRO de Leroy Jones.

A parte de las impagables enseñanzas y la amistad de Enrique Buenaventura y demás valiosos compañeros que formaban el elenco, el trabajo en el T.E.C. les permitió establecer relaciones dinámicas y hacer talleres prácticos con hombres de teatro de la talla de Santiago García, Atahualpa del Cioppo, Luis Valdés o Jerzy Grotowski . Bernal y Herrera, hablan de esta época, de estos trabajos y sobre todo de estas gentes como vitales en su formación.

Hace más de veinte años dejaron el grupo. Por ese entonces, en talleres para gente joven y grupos de reciente creación, se ocupaban de asesorarles en Expresión corporal, Actuación y Montaje. Se honran de haber sido fundadores  y directores, en sus inicios, del Teatro La Máscara de Cali o El Gesto de Bogotá; de esta colaboración quedaron sus puestas en escena de CUÁNTO CUESTA EL HIERRO o PLUTO, DIOS DEL ORO de Aristófanes,  o UNA HISTORIA VULGAR de Pablo Neruda. Fue allí donde forjaron  sus primeras herramientas en dirección.

A día de hoy, Herrera desarrolla su importante labor profesional en Cine,  TV y Teatro en Colombia.  Bernal, ejerce como actor, autor y dramaturgo en España, siempre en trabajos de calidad reconocida. Actualmente prepara en Madrid, el montaje de su texto más reciente, “AYER DE BESOS”.

Cortesía de Carlos Bernal, fotografía de Andrea Villarraga.

NOTAS SOBRE EL MONTAJE

Puesta en escena ágil. Humor inteligente, variedades y trucos de magia. Animación de los objetos y aprovechamiento máximo del espacio. Música, flechas y botellas de cerveza. Interés creciente; entre lo real y lo mágico conviven y se dan de coces lo histórico y lo cotidiano.

Se necesitan mutuamente. Son dos dinosaurios caminando perdidos por el asfalto y les duelen los pies. Dos perdedores. Son lo que queda de una época de gestas y de aventuras; románticos con hambre, cada vez más ajenos al mundo que ellos ayudaron a construir y a las épocas que les ha tocado vivir. Antiguos enemigos ilustres, hoy cómicos de barraca, que solo existen cuando las luces de la tarima se encienden.

Qué es verdad y qué es mentira de lo que cuentan. Que es show y que es profecía en la obra de teatro.

Trama y argumento van avanzando de sorpresa en sorpresa, de truco en truco, de pecado en pecado. La risa y la poesía invitan al camino.

Y dos personajes ( o dos mundos) que creíamos ya descontextualizados van resucitando ante nuestros ojos, llenos de matices de rabiosa y preocupante actualidad.

Sobriedad en el montaje y elegancia en la actuación. Decorado rico en significados y funcional. Texto con resonancias cinematográficas y circenses. Con estos elementos se cuece “El octavo pecado de Buffalo Bill” y su aroma despierta en los espectadores goce y  curiosidad.

 

REPARTO

Gerónimo:  AMPARO CONDE

Buffalo Bill: JORGE HERRERA

 

EQUIPO ARTÍSTICO

Vestuario, Escenografía y Música   “Grupo Esacto”

Dirección: Jorge Herrera

Autor: Carlos Bernal.

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