Una mirada desde afuera

Publicado el Johanna Andrade

Una Cena en la Oscuridad

Opaque dining in the dark.
Imagen tomada de Google imágenes.

 

Las experiencias de vida llevan al ser humano a comprender como otros viven, sienten y perciben la vida. Basados en el concepto que ha logrado popularidad en Europa, en ciudades como Berlín, Paris y Vienna fue creado el restaurante Opaque (traducido Opaco) situado en las ciudades de San Francisco, San Diego, Los Ángeles, New York y Dallas. ¿Alguna vez ha imaginado una noche con la mejor comida a la carta, una buena compañía, pero sin la posibilidad de ver lo que está a su alrededor?, es decir, comer en la oscuridad como si estuviera a ciegas.

Por lo general el ser humano siente miedo de lo nuevo porque aquello que no hace parte de nuestra vida rutinaria nos causa terror, “primera vez que entre sentí miedo porque no sabia que iba a pasar”.  Agregó, Farman ciudadano de la ciudad de San Francisco.La regla para ingresar al restaurante es no tener celulares encendidos o algún objeto que tenga luz. “Estaba muy emocionada porque tenía curiosidad de que iba a pasar. Hay un corredor donde hay luz, dos sillas y una mesa donde decidí mi menú, entre ellos hay platos misteriosos que el cliente puede elegir. Después la mesera invidente salió a recibirme por lo que fue necesario tocarla en el hombro todo el trayecto hasta llegar a la mesa asignada”.  Afirmó Angie Calderón, residente de California.

Según Alex Mandioro, administrador de Opaque, el entrenamiento toma años, pero han logrado mantener el mismo personal desde que abrieron el restaurante por lo que los años de experiencia ayudan a que el servicio sea el mejor. Además, agrega que el restaurante es la mejor vía para ayudar a personas con discapacidad. “Me siento orgulloso de tener nuestros servidores porque son únicos y tienen un sentido inolvidable”.

Courtney Mazzola , Psicoterapeuta, fisioterapeuta y empleada de Opaque afirma, “las personas ven la experiencia como una aventura, la gente dice wow! Es totalmente oscuro!. Hay dos grupos: los que no podemos ver y los que no ven porque es oscuro, pero hay gente comprometida con la aventura”.

Aunque una cena oscila entre $79 a 99 dólares por persona, según el día. Los clientes creen que vale la pena experimentar por unas horas la idea de comer a oscuras atendidos por personas invidentes, ya que no solamente se convierte en una aventura sino que es una experiencia  de reflexión en la que se admira  las habilidades y condiciones de las personas videntes que desarrollan sus sentidos para tener la habilidad de una persona sin discapacidad.

 

Foto tomada de Google imágenes.
Foto tomada de Google imágenes.

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