LA CASA ENCENDIDA

Publicado el Marco Antonio Valencia

ME ENCANTABA VER CARGAR A MI PAPÁ

Por: Carlos Ignacio Mosquera  (abogado y profesor de la Universidad del Cauca)

Mi papá se inició muy joven en el carguío, a los 13 años. Muy pronto llegó a las «ligas mayores», pues empezó a cargar con el Señor del Perdón y con la Virgen de la Soledad. Fueron 53 años de sus 68, de carguío. Llegó a cargar cuatro noches en los siguientes pasos, además de los ya citados: el Santo Ecce Homo y la Crucifixión; todos ¡con el mismo hombro! Daba gusto verlo cargar con esa elegancia y esa fortaleza. Cuando en algunas ocasiones no le fue muy bien, no se le notaba ni se quejaba. ¡‘Marioé’ era un carguerazo!

Comentarios