Imperio del Cáncer

Publicado el Julia Londoño

Se buscan bailarines

En una de las últimas conversaciones que tuve con mi abuela materna le pregunté si ella, una mujer que nació a comienzos del siglo XX, creía que el mundo en el que nació era radicalmente distinto al mundo hoy. Es mejor, dijo, porque para más de la mitad de la población mundial hay más oportunidades.

Estaba hablando de los cambios que han logrado las mujeres del mundo. Y sabía de qué hablaba, cuando ella nació las mujeres no podían votar en Colombia, no existían las toallas higiénicas, ni los anticonceptivos, aún no eran muchas las mujeres que iban a la universidad  ni las que alcanzaban independencia económica.OBR-logo-english

Pero el siglo XXI trajo otros retos.

One billion rising org es una iniciativa de Eve Ensler, creadora de los famosos “Monólogos de la vagina” y del movimiento V-Day -que este 14 de febrero cumple 15 años luchando contra la violencia de género  y le atribuye la “V” en su nombre a la Victoria de las Vaginas en San Valentín- para llamar la atención sobre las agresiones hacia las mujeres. La campaña invita a todas las mujeres y a sus compañeros  a bailar, el próximo jueves 14 de febrero, como un gesto para alzarse contra la desigualdad.

La campaña denuncia que una de cada tres mujeres en el mundo será abusada sexualmente o golpeada en su vida, citando datos de UNIFEM (2003), y replica que si 1 billón de mujeres abusadas es una atrocidad,  un billón de mujeres bailando es una revolución.  

Uno podría pensar que bailando no va a cambiar la situación de sumisión de las mujeres en los países musulmanes, ni a defender los derechos de las trabajadoras sexuales, que el índice de embarazos en adolescentes no va a bajar, que las mujeres quemadas con ácido no se van a acabar, que no se va a erradicar el machismo en la costa colombiana ni nos van a pagar lo mismo a las mujeres que a los hombres que tenemos cargos similares, pero bailar no cuesta nada.

Y si hay un billón de mujeres en el mundo que se toman el trabajo de tener un gesto solidario por esta causa al menos la campaña se hará oír. Por eso el registro es importante, no es suficiente con bailar solas, busquen sus parejas, háganlo en público, convoquen a un flash mob o hagan un video.

Es la misma razón por la cual el testimonio de Charlize Theron aparece en la página de la campaña, no porque su historia de vida sea más importante que la de cualquier otra mujer que creció marcada por la violencia de género, sino porque su voz puede hacer que retumbe el mensaje, que alguna persona se entere, que otra se indigne, que alguna tome una decisión o haga alguna reflexión que la movilice.

Los procesos sociales no se dan de un día para otro. Lo que hoy se reivindica antes era impensable, si hay quien pelee hoy porque los salarios sean equitativos entre hombres y mujeres  significa que alguien peleó y ganó antes por el acceso de las mujeres al mundo del trabajo remunerado.

Yo creo en la presión social para poner en la agenda temas, creo que la presión social para cuestionar ideas y sembrar dudas, para desbaratar certezas.  

Así que invito a la que quiera y al que quiera, porque los hombres están también convocados, a unirse a la campaña. Para bailar no se necesitan excusas, pero sí inspiración. www.onebillionrising.org

 

@JuliaLondonoBoz 

 

 

 

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